El pasado viernes 27 de Noviembre en el Teatro Liceo de Salamanca se repartieron los Premios Anuales del Deporte Salamantino. Una buena parte de los premios se los llevaron aquellos deportistas individuales o equipos que han logrado importantes éxitos a nivel nacional o internacional. Otro pequeño bloque de premios se otorgan como reconocimiento a los esfuerzos y a la dedicación de deportistas, directivos y personal relacionado con el mundo del deporte.
El Promesas de Villoria, que ha ampliado sus modalidades deportivas, ha recibido una placa especial que la Junta de Castilla y León entrega en reconocimiento de su meritoria trayectoria en cuanto a participación, implicación social, compromiso y esfuerzo de sus directivos.
Villoria puede presumir del Club Deportivo Promesas de Villoria. En la localidad, con unos 1500 habitantes ha movilizado cada año a unos 100 niños/as. Es justo reconocer la participación numérica de efectivos desde la comarca, pero es indiscutible el papel de Villoria, tanto por su aportación de medios (campo, vestuarios, iluminación…), como la de los directivos del Club, casi todos de la localidad que con dedicación de horas de trabajo, unas veces físico, otras administrativo han hecho despegar un milagro deportivo que no se da en otras localidades de la provincia. En relación con los habitantes de la zona, en Villoria se ha superado con creces el grado de participación que se consigue a nivel de juegos federados en Alba de Tormes, en Béjar, en Peñaranda, en Ciudad Rodrigo…
Podríamos pensar que se trata de un milagro, pero si milagro es algo que no tiene explicación racional, debemos descartar esta calificación y decir sin tapujos que es el fruto de la dedicación, de la planificación y del altruismo de unos pocos.
El viernes pasado (27/10/2010) vimos en TV8 de Castilla y León a Juan Ramón recoger el premio. El premio es para todos los que conformamos el club: padres, entrenadores, jugadores/as, ayuntamiento…, pero es de justicia reconocer que son tres los pilares en que se asienta el club:
-El primero es material, lo aporta el ayuntamiento de Villoria que ha invertido en el campo, en la iluminación, en los vestuarios…
-El segundo es administrativo, lo aporta Felipe, nuestro secretario, que robando tiempo a su ocio y a las obligaciones familiares (enhorabuena por su reciente paternidad), pone un poco de orden en la gestión nada sencilla de inscripciones, revisiones médicas y otras cuestiones propias de su cargo.
-El tercero es de gestión directa, la aporta Juanra, el presidente (que a la vez es entrenador, personal de limpieza, jardinero, utillero, recogepelotas…).
Si menospreciar los dos primeros pilares, creo, desde mi modesta visión del club, es Juanra el motor que mantiene al Promesas y a él va dedicada esta colaboración para «Besana».
