A PESAR DEL MAL TIEMPO SE CUMPLIÓ LA TRADICIÓN.
Al mal tiempo, buena cara. Este refrán tuvimos que aplicar los villorejos en la cabalgata de sus majestades de oriente ya que la lluvia y el viento deslucieron el acto.
A PESAR DEL MAL TIEMPO SE CUMPLIÓ LA TRADICIÓN.
Al mal tiempo, buena cara. Este refrán tuvimos que aplicar los villorejos en la cabalgata de sus majestades de oriente ya que la lluvia y el viento deslucieron el acto.