65 niños de edades entre los 0 y 4 años dan un margen de esperanza al futuro de nuestro pueblo. Cada vez que aparece una nueva estadística sobre los movimientos demográficos en nuestra provincia, observamos que uno de los datos más relevantes es la continua despoblación de las zonas rurales en favor de la ciudad y de los pueblos que la rodean en un perímetro no superior a los 10 kms.. Así nos encontramos con pueblos que han multiplicado hasta por diez su población original. Son los casos de Carbajosa, Cabrerizos, Villamayor, Villares de la Reina, Santa Marta, etc., por citar los más significativos.
El resto de pueblos han ido a la baja, sólo los Cabeza de Partido mantienen el tipo a duras penas y el resto, salvo honrosas excepciones, va en caída libre y, si alguien no lo remedia, al cabo de unos años muchos de estos municipios desaparecerán del mapa; y otros, que antaño fueron poblaciones con un considerable número de habitantes, se quedarán como pueblos donde la mayoría de sus pobladores serán ancianos y, cuando menos, sen quedarán como lugares de segunda residencia de sus vecinos en periodos vacacionales.
Una de las «honrosas excepciones» de las que hablamos es nuestro pueblo. Si nos atenemos a los datos del I.N.E. correspondientes al año 2010, Villoria cuenta con una población infantil comprendida entre los 0 y 4 años de 65 niños. Esto nos coloca a la cabeza de todos los pueblos de Salamanca, si exceptuamos los mencionados al inicio, incluso por encima de pueblos como Lumbrales y Ledesma, pueblos con una población mayor que el nuestro y que cuentan con 44 y 51 niños, respectivamente, en este tramo de edad. En el cómputo global estaríamos ocupando el puesto nº 15 de toda la provincia incluyendo la capital.
Los pueblos de nuestra comarca son un ejemplo de lo que hemos expuesto anteriormente. Destaca que ninguno de ellos tiene el casillero a 0, siendo los mínimos Cordovilla y Moriñigo con dos niños cada uno y por arriba Babilafuente con 32 y Villoruela con 31 ocupan el segundo y tercer puesto tras Villoria. Estos son los niños de entre y 0 y 4 años que tienen los pueblos de nuestra zona:
Los datos son contundentes y mucho nos tememos que a medida que pase el tiempo serán aún peores si no se buscan soluciones. Por lo que respecta a nuestro pueblo está claro que la tendencia no es mala, pero que estamos en una situación en la que cualquier vaivén político o económico nos puede llevar por los mismos derroteros que en otros pueblos. Conviene, pues, centrarse en mantener esta tendencia positiva con todos los medios que tengamos a nuestro alcance: políticos, sociales, culturales, económicos, empresariales… y que ese espíritu «villorejo» del que con frecuencia presumimos se materialice en trabajar juntos por un objetivo común: Que Villoria, sin dejar de ser un pueblo, siga siendo referencia en la comarca de Las Villas.