Cuando en el mes de Julio se comenzaron a hacer las primeras reuniones para confeccionar el cartel de fiestas, fueron las dificultades económicas las que marcaron la pauta para su elaboración. La recuperación de la Comisión de festejos ha sido la novedad principal en cuanto a la organización se refiere y bien que se ha notado.
Hablar de qué ha estado bien o mal es cuestión de gustos, como siempre. Lo que si es cierto es que tiempo y actividades ha habido para divertirse y, a buen seguro, que el que haya querido así lo habrá hecho, tener un día menos festivo no ha sido obstáculo alguno para ello.
Como siempre, toros, verbenas y gastronomía han sido los ejes centrales de cuatro intensos día de fiesta a los que habían dado paso una serie de actividades menos populares, pero no por ello menos importantes y que conformaron la semana cultural. Comenzaron las fiestas con un tiempo envidiable que se ha mantenido durante toda la semana y con el pregón de Perfe Sánchez en el que nos recordó lo que había sido y es su relación con Villoria y en el que abundaron las referencias al pasado sin olvidar el presente y la mención a un buen número de personas que para él han sido referencia en este pueblo.
Las peñas, como cada año, son la que han puesto el toque de alegría y colorido, sobre todo esa noche en la que adquieren protagonismo especial con sus camisetas y sus disfraces como podréis ver en la galería de imágenes. El resto de actos se han celebrado con mayor o menor éxito según se mire. Este año no hemos podido contar con la presencia de Sálvame de Luxe, y es que «el Janeiro» no ha tenido el tirón del año pasado. Esta vez los parabienes se los ha llevado «el Gallo». Este no es tan famoso, pero si más torero, sin ninguna duda.
Fin de unas fiestas que han sido las primeras para esta nueva corporación que salió de las urnas el pasado 22 de mayo y a la que no se le puede negar voluntad y ganas de hacer las cosas. Ahí los hemos visto todos los días al pie del cañón, tanto a los componentes del PP como del PSOE junto con los de la comisión. Cuando los que tienen que estar al frente predican con el ejemplo es de agradecer y esto es lo que queremos destacar en nuestro comentario. Nuestra enhorabuena para todos ellos.
Llegó el final, el momento de reencontrarse con el trabajo, con los estudios con la monotonía de los quehaceres cotidianos. Otra vez los que viven fuera vuelven a su lugar de residencia lejos de su querido pueblo. Atrás quedarán para siempre los recuerdos, buenos o malos, tristes o alegres, pero siempre nos queda la esperanza de volvernos a ver las fiestas del próximo año y gritar con el pregonero de turno:
¡¡VIVA LA VIRGEN DE LA VEGA!! ¡¡VIVA VILLORIA!!