En todo momento se habla de ésta crisis como una situación catastrófica, y sin duda alguna lo es Quisiera hacer un enfoque diferente de ésta situación tan sonada en estos últimos años que es La Crisis, y que como bien explica en su artículo T.P., uno de los aportes positivos es que hemos ampliado bastante nuestro conocimiento en terminología económica.
En todo momento se habla de ésta crisis como una situación catastrófica, y sin duda alguna lo es. Seguro que en éste momento alguien, mientras está leyendo esto, pensará que para saberlo en verdad hay que vivirlo. No lo dudo, pero como antes mencionaba quiero resaltar todo lo bueno que está aportando ésta situación a la sociedad.
Personalmente estoy muy sensibilizada con todo lo referente a la sostenibilidad del planeta. Intento en lo máximo posible vivir de una forma mas natural, aunque reconozco que me es inevitable utilizar el coche cada día para ir a trabajar ya que donde resido el transporte urbano deja mucho que desear. Pero a pesar de eso, intento compensarlo con otras acciones en las que aporto mi pequeño granito de arena: reciclo y reutilizo, apago luces que no necesito, no dejo correr el agua por que sí, porque para eso la pago como dicen algunos, mientras llega el agua caliente a la ducha recojo la fría que sale y la utilizo para el wc , utilizo el agua de lavar las verduras y toda la que puedo recuperar para regar las plantas. En fin, pequeños gestos que además de que ayudan a ahorrar, si todos hiciéramos un poquito, de seguro que los recursos serían suficientes para todos. Otro tema es el de los intereses creados entorno a ellos, pero esto no es lo que me ocupa en este momento.
Me gusta leer y buscar información referente a todos éstos temas y con todo esto que estamos experimentando, he observado como han vuelto a resurgir medios de vida que se habían visto ensombrecidas por el poderoso caballero «Don Dinero» y la locura del consumo. En las ciudades se están fomentando los denominados «huertos urbanos», se utilizan solares abandonados en los barrios para cultivar huertos y trabajarlos entre todos y compartir lo cultivado. Ha resurgido el «trueque», tu tienes algo que yo necesito y yo algo que tu necesitas, pues solucionado, sin necesidad de un euro. Las tiendas de segunda, mano donde se deja lo que no necesitas y por un precio simbólico otra persona puede comprarlo y reutilizarlo. Se comparte el coche, existen redes que ya funcionan a nivel europeo. Han nacido otros bancos que no cobran intereses por cualquier gestión «Los bancos del tiempo», un tipo de asociación donde la moneda de cambio es «la hora», no importa el trabajo que se realice, el valor del servicio es el tiempo que se tarda en hacerlo. Ah, y también el «Hazlo tu mismo», que seguro que a más de uno le ha descubierto sus habilidades ocultas. Y existen otros muchísimos más proyectos enfocados en ésta dirección, la autosuficiencia y la no tanto dependencia del sistema.
Toda ésta situación debiera hacernos reconsiderar nuestros valores hacia otra forma de vida no basada tanto en el exterior, sino mas hacia el interior, mas en el ser que en el tener. Y en lo importante que es unirse, crear un grupo con fines comunes porque entre todos, seguro que se encuentra una solución.
Animo a los que se encuentren en la difícil situación de no tener un trabajo, que no se dejen abatir. Que se dejen de pensamientos catastróficos los cuales no ayudan a la mente, más bien la paralizan. Que se animen y busquen alternativas rodeándose con gente motivada y que contacten con grupos de éste tipo que seguro que alguno hay en Las Villas.
Y como dice Jordi Pigen, autor de La Buena Crisis, ESTA ES UNA OPORTUNIDAD PARA DESPERTAR.