Para todo siempre hay un antes y un después. Hoy es el día después para los Petaxixish y el día antes para los Carcabosos. Para aquellos llegó uno de los días más tristes y melancólicos que pasarán al recuerdo de las andanzas juveniles. Para éstos se abre la puerta de un año de reuniones, de preparativos y de larga espera hasta que llegue el tan ansiado día donde serán los protagonistas exclusivos en todo el pueblo. Esto lo sabemos todos los que hemos pasado por estos trances, que somos la gran mayoría.
Nada lo iguala y siempre se recordará, como los demuestra el hecho de que pasados veinticinco años volvemos a las andadas con más años, más kilos, más canas e incluso con más ganas, si cabe, que cuando fuimos jóvenes.
La importancia de esta fiesta está siendo refrendada de unos años a esta parte porque las diferentes quintas no se resisten a esperar tantos años a juntarse y cada enero, coincidiendo con estos días, se reúnen para cenar y continuar la fiesta acompañando a los quintos del año.
Interesante vuelco el que ha dado la fiesta. Parece que hemos dicho adiós a los bailes donde a penas se veía a los quintos y a sus familiares. Ahora es un día importante en el calendario festivo de nuestro pueblo. Este año se han batido todos los record y el ambiente en el pueblo era el de las grandes ocasiones.
Hoy los Petaxixish pasan a formar parte de este nuevo club y los Carcabosos entran en capilla para ser los actores principales.¡DIVERTÍOS!