Al margen de las bajas temperaturas,el tiempo invernal nos regala un formidable
espectáculo en nuestro paisaje,alrededor de Villoria: la llegada de las grullas,bellas aves
de 1,20m de altura y 2,20m de envergadura,que vuelan en ruidosos bandos en forma de V.
Se dice que estas aves migratorias se hacen novios en la zona de las Villas y se casan
en Europa.Es en enero cuado comienzan sus cortejos nupciales con bailes y trompeteos
continuos,parecen imitar los bailes humanos,dando saltos,aleteando y gritando de pura
excitación.
Nosotros tenemos la gran suerte de poder disfrutar de estas escandalosas aves en el entorno de Villoria y en el Azud de Riolobos.Al atardecer y después de comer,durante todo
el dia en los secanos y en rastrojeras de maíz,llegando a concentrarse a cientos de individuos.
Son muy desconfiadas,sed por favor muy respetuosos,utilizad prismáticos y no abandonéis los caminos,situandoos a una distancia prudencial.
Josué Portela