EL NORTE DE CASTILLA LE DEDICA UNA PÁGINA
El periódico «El Norte de Castilla» se hizo eco el pasado día 15 de enero de 2015, de los 102 años cumplidos por Petra el pasado 27 de Noviembre.
http://www.elnortedecastilla.es/salamanca/201501/11/maestra-villoria-atesora-anos-20150111125818.html
En la noticia refleja la vida de «nuestra paisana», donde nos dicen que Petra Corredera Ávila es el mejor testigo vivo de las últimas generaciones de esta localidad salmantina. Esta mujer dedicó parte de su vida al cuidado de los más pequeños.
Petra Corredera tenía una especie de guardería, en la que enseñaba a niños y niñas de hasta seis años. Antes no había guarderías en los pueblos, por lo que la iniciativa de Petra Corredera fue una ayuda muy valorada por las madres, que encontraban en ella una ayuda muy valiosa.
Petra Corredera no sólo se dedicaba a tener entretenidos a los más jóvenes de Villoria, sino que también se encargaba de enseñarles, de tal modo que cuando acudían a la escuela iban muy bien preparados. Sus sobrinas, Charo Barbero, Ángela Escudero, Pilar Corredera e Ignacia Corredera recuerdan anécdotas que su tía les ha contado decenas de veces, por ejemplo lo que sucedía cuando los niños entraban en la enseñanza escolar reglada. El maestro les mandaba comprar una cartilla y al día siguiente les tenía que mandar comprar otra porque ya se sabían todo.
Petra Corredera era tan buena maestra que ha guardado en su memoria siempre el rostro de sus alumnos, pues solo con ver aquellas fotos de familia en las que se retrataba a todos sus alumnos con ella ya sabía quiénes eran. Hasta las propias madres le preguntaban quién era su hijo en el retrato.
Le gustaba mucho el ganado y recuerda que le gustaba mucho cuidar de los conejos, iba a buscar hierba para alimentarlos.
Otra de las peculiaridades que siempre ha distinguido a esta mujer es su fuerte religiosidad. Petra Corredera Ávila pertenece a la Alianza de Jesús por María. Sus sobrinas explican que era una agrupación que no dejaba casarse a sus miembros o que estaba formada de personas solteras. Petra Corredera cuenta que cuando le dijeron que si quería apuntarse a esta especie de agrupación religiosa, ella dijo que se lo pensaría y eso fue decisivo para que cuando se decidió le aceptaran. Esta centenaria ha sido ejemplar también en este aspecto, pues siempre ha respetado la doctrina católica y ha sido de acudir a misa diaria.
También refleja la noticia la otra parte de su vida vinculada a la panadería: Petra Corredera Ávila era la mayor de sus hermanos. Su padre, Félix Corredera, tenía panadería y labor y su madre se llamaba Bernarda Ávila. Esta mujer recuerda que con siete años, mientras sus padres amasaban a mano, ella ayudaba a pesar la masa y en el resto de labores de este duro oficio.
Después siempre ha cuidado de sus padres, los oficios de la casa y le gustaba hacer fotos. De mayor, sus sobrinas han sido las que, para que Petra Corredera no siguiera viviendo sola en su casa, se han encargado de cuidar de ella por turnos.
Vayan desde estas líneas el recuerdo y reconocimiento de lo que sigue siendo un recuerdo vivo de nuestro pueblo.