Tengo que dar las gracias a todos los que estuvisteis en su despedida, que fuisteis muchísimos Hace muchos meses que no escribo en nuestra Besana, pero hoy necesito agradecer a todo mi pueblo el apoyo que nos ha dado a la familia estos días. Todos conocíais de una manera o de otra a mi madre, si no en persona seguro que habíais probado alguno de sus platos, pinchos y como no la carne de la vaca en las Fiestas de la Virgen de la Vega que tantos años ha preparado para su pueblo. Siempre me acordare de las perolas ya que nos tocaba lavarlas al día siguiente, de ir a ver a mi madre y a mi padre en la alameda y ver las ganas con que hacia la comida para todo su pueblo, siempre apoyada por los voluntarios que hacían lo que mi madre les decía como si ella fuera la mismísima Carme Ruscalleda. No fue a ninguna escuela de cocina ni estuvo en los mejores restaurantes, tampoco lo necesitó porque tuvo a la mejor profesora, mi abuela FILI «La tía cojones» como la llamaban, siempre estaba esperando a que llegaran los domingos por la mañana los borrachos a dar a la puerta para que los abriera y les llamara de todo pero al final les ponía unos pinchos, así era mi abuela. Isabel no tenía la fuerza que Fili pero si su espíritu de sacrificio y esa mano para la cocina que solo tienen unos pocos, porque la teoría es fácil pero la práctica… Tuvo que cuidar de nosotros y de mis tíos, todos alrededor de la mesa en la Capri para comer y como no, mi abuela a su lado que mi recuerdo es de verlas a las dos trabajando en la cocina del bar. pelando patatas, limpiando la oreja y luego prepararla, que queda mal que yo lo diga pero como la oreja de la Capri no la hay en el mundo y solo la hemos probado los del pueblo y todos aquellos que han visitado ese templo de la comida castellana que no está en la guía michelín pero que los que lo conocemos lo valoramos como tal ya que esas recetas pasaron de mi abuela a mi madre y espero poder recuperarlas algún día porque el gen que me ha pasado mi madre es el de la cocina y desde luego estoy agradecido ya que me apasiona y cada vez que puedo preparo algo para mis amigos y familiares lo hago.
Mamá tengo muchos momentos inolvidables en mi mente tanto buenos como malos pero como bien sabemos la mente es selectiva y desde luego que los malos están borrados por completo, me acuerdo la primera vez que viniste a Madrid a verme y te hice para comer lubina al horno y un arroz con dos salsas que nunca los habías hecho, cuando volviste a Villoria me llamaste porque querías hacer la lubina en el restaurante, la verdad que me sentí halagado porque no pensaba que la mejor cocinera que he conocido me pidiera una receta, y a partir de ahí me aficione todavía más a las artes culinarias e hice el curso de cocina, yo he estudiado para esto pero seguro que no te superare en tus platos nunca.
Que decir de tu amor a los tuyos, siempre pendiente de Manolo y Jose que eran tus otros hijos y de Tini que aunque tuviera su familia no dejaba de ser tu hermano. Criaste cuatro hijos y te casaste con mi padre a pesar de que mi abuelo mundo no podía ni verle, pero contra viento y marea creaste una familia con ese chico alto y bien vestido que venía de estudiar de Salamanca, que terminados sus estudios fue a Valencia a trabajar a la ford pero que al mes se volvló a tu lado porque el amor lo puede todo hasta dejar ese trabajo por el que se preparó toda la vida para trabajar en la agricultura por estar al lado de esa rubia platino que tenía pretendientes por doquier pero que al final eligió al que ella quiso y no era el mas rico pero si el mas bueno, que al fin y al cabo para ti era lo mas importante porque como tu siempre me decías » NO ES MAS RICO EL QUE MAS TIENE SINO EL QUE MENOS NECESITA».
Tengo que dar las gracias a todos los que estuvisteis en su despedida, que fuisteis muchísimos, al alcalde que estuvo pendiente desde el primer momento que le llamo mi padre, a sus primos, sus amigos que nunca la dejasteis sola y ahora a mi padre lo tenéis arropado, a mis tíos, mis hermanos, a mis suegros, pero quiero hacer una mención especial a mi querida tía BRIGIDA que se pasaba los días a su lado intentando animarla y conseguía lo que ninguno éramos capaces.
Isabel no querías que te llamaran abuela porque decías que te hacia vieja, pero estos nietos que tienes y la nieta que llegara en breve estarán orgullosos de tí y tú desde ese lugar que te has ganado en el cielo, al lado de tu madre y tu padre nos veras y controlarás a todos, pendiente de que hagamos el bien y reprochándonos cuando preparemos alguna.
Escribiría un libro sobre tí pero en breves se levantan tus nietos con ganas de guerra y tengo que estar con ellos como tu hiciste con todos nosotros hasta que esta enfermedad maldita te llevo de nuestro lado. Mama descansa en paz y sobre todo disfruta del paraiso eterno que nosotros nos quedamos sintiendo tu pérdida en este mundo mal repartido y que si tu tuvieras que organizar seguro que ninguno pasaría hambre…