Las gaviotas vuelan siguiendo los pequeños pesqueros, esperando que en su estela se levanten pequeños pececillos para llevárselos a sus insaciables y carroñeros buches
Pero como pasa siempre que llueve descampa y este día no iba a ser diferente. Se disipa la niebla y poco a poco la tierra se hace tierra y el mar, mar y los pájaros vuelan buscando su árbol o el alero del tejado, o el agua del mar, del inmenso mar. Las gaviotas vuelan siguiendo los pequeños pesqueros, esperando que en su estela se levanten pequeños pececillos para llevárselos a sus insaciables y carroñeros buches ¡Que habilidad tienen las gaviotas! ¡Como pillan en el aire lo que los pescadores al limpiar el pescado lanzan al mar!
Ya está entrando la mañana, el mar parece que se ha tomado un respiro, la calma reina e invita a que los pequeños barcos pesqueros se preparen para salir a su tarea ¿Que se llama pesca de cercanía? Yo les miro salir todos con su proa cara alta mar, donde estarán todo el día y la noche, buscando el banco de pescado con el que llenaran sus bodegas. Para volver al ponerse el sol del día siguiente, con su pescado fresco, que se venderá en las plazas de toda España
.
Mirando cómo se alejan es como si flotaran en el mar, les voy perdiendo de vista, primero uno, luego otro, todos desaparecen parece como si el mar se los fuera tragando uno a uno ¡Que vida más dura, solo agua y cielo y nada donde agarrarse! Y todo para coger ese pescado, con el cual sacaran para alimentar a sus familias si ellos vuelven a puerto, que por desgracia hay veces, que ni vivos, ni muertos vuelven.
Yo sigo mirando a lo lejos del mar, la distancia en el mar te confunde, todo parece estar cerca cuando miras. Sin embargo todo está lejos porque se ve plano, no hay montañas, solo las bravas olas se dejan ver cuando elevan los barcos a su cresta, para luego hacerlos desaparecer como si se los tragara el mar. ¡Los mueve como si fueran simples cascaras de nuez! Por el día y por la noche el mar no deja de moverse, los marineros muchas veces tienen que trabajan atados, por el día para poder trabajar en cubierta, por la noche para poder dormir y no caer de sus litera. ¡Trabajo muy duro el de los pescadores!.
Con esta claridad, miro para ver más lejos. De pronto una pequeña silueta se divisa allá en la lejanía, es pequeñito, muy pequeñito, pero sigo mirando pues como el sol me da en la espalda es más fácil ver más lejos. Por eso se ve, que aquello que viene, crece y crece, pero como no es la primera vez que yo veo esto no me extraña aquel cambio. Pues aquella pequeña silueta que a lo lejos se veía, ahora que se ha cerca se ha convirtiendo en un monstro,
Ahora el puerto se ha convertido en una torre de Babel, donde se hoyen cantidad de lenguas diferentes, parece que nadie se entendiera, sin embargo pasean juntos durante todo el día, llenando de colorido la ciudad para alegría de los comerciantes,
Es la hora de que los pequeños pesqueros vuelvan unos cargados y otros no, pues el trabajo de pescar es de suerte unos días más, otros menos, pero todos con suerte vuelven con su carga al anochecer para subastar su pescado en la Lonja de esa forma tan original, Pues empiezan la subasta de más a menos hasta que uno, o una diga para mí.
Al contrario que las subastas de cuadros que va de menos a más, hasta que el más rico se lo queda.
Del pescado se hacen poca gente rico y por desgracia es un trabajo muy pero muy sacrificado.
BARQUITO PESQUERO
Que en las noches de luna clara,
eres silueta en el mar,
y te siguen los delfines
amigos de marineros,
en la inmensa soledad.
De espuma blanca con sal,
se peinan en ti las olas,
con gracia de enamorar,
se miran unas a otras,
te abrazan y luego se van.
¡Qué buena estrella te guíe!,
golondrina de la mar,
eres juguete del viento,
dejas tu estela y te vas.
Pescadores, pescadores.
Embajadores del mundo,
rosas del mejor rosal,
vais entre el cielo y la tierra,
unos buscando aventuras,
otros a ganarse el pan.
Todos con la tez morena,
lanzan un beso y se van,
¡pescadores,…pescadores!!..
que la rosa de los vientos,
os devuelva a vuestro hogar,
¡ pescadores,…pescadores !!,…
golondrinas sois del mar.
Sigifredo Maria Cascón