La quinta del 57 ha querido celebrar la entrada en una nueva década. Si 20 años no es nada, 60 son tres veces nada. Quince años han pasado desde que se reunieron la última vez para celebrar la fiesta de los 25 años de quinta. Menos jóvenes, más maduros, con menos pelo o con más canas , más gordos o más flacos, da igual , la vida sigue y hay que celebrarlo. Un recuerdo para los que no han podido estar y para aquellos que ya los dejaron para siempre, pero están presentes en su memoria.