GRACIAS, GRACIAS Y GRACIAS
El final del verano 2019 ha sido muy especial y no puedo por menos que deciros:
Gracias: a los monitores de la Escuela de Verano, que aun siendo jóvenes y para muchos su primer año, han hecho que sean unos días inolvidables para todos los niños.
Gracias: a los monitores que no soltabais nunca la mano a Juan Andrés, tan pendientes siempre de él, y por esperar aún sabiendo que llegábamos más tarde que los demás.
Gracias: a los socorristas, tan profesionales como humanitarios con todos. Por vuestra paciencia y trato.
También a los niños que con tanta insistencia les pedía diciendoles “¡Tírate de cabeza!” y que tanta ilusión le hace.
Gracias a: los organizadores del Campeonato de Fútbol Sala Infantil que tanto hacéis soñar a los niños.
Gracias a: sus amigos, como él dice, del equipo “Con Sal” que se acordaron de apuntarle con ellos, sabiendo que él no iba a ayudarles a ganar. Sólo con ese gesto ya son unos campeones, por hacer que cada día estuviera ilusionado con su mochila y su botella de agua, y pensando en qué zapatillas iba a llevar al partido. Por hacer que fuera uno más, sacándole al campo en cada tiempo, llegando a disfrutar tanto de la final que os merecíais.
Gracias a: los jóvenes que se acordaron de él para hacer el saque de honor en la gran final de fútbol sala de mayores. Más no se puede pedir.
Y gracias, a los que cada día, en su insistencia por llamaros la atención, le devolvéis la sonrisa.
Juan Andrés.