Besana Villoria – Revista digital Besana de Villoria

ESTA BATALLA LA TENEMOS QUE GANAR

Esta batalla la tenemos que ganar todos si queremos a este mundo y a España, con nuestros hijos y nietos, porque este problema nos salpica a todos. Con mi edad me encuentro en la lista de los más vulnerables, pero no me doy por vencido, aunque he pasado dos veces por el quirófano a consecuencia del corazón, así que cuando me levanto doy gracias de estar vivo.

Así que con mis 77 años me encuentro joven, según dicen los médicos estamos en la lista de dejar este mundo. Os digo, muchas veces los médicos se equivocan y no te mueres del coronavirus, sino de una depresión, es una guerra sin sangre, así que vamos a echarle dos huevos hasta que el cuerpo aguante, no quiero meter miedo, sí esperanza.

Con este confinamiento que tenemos le doy muchas vueltas a la cabeza, no sé casi en el día que vivo, pero me da tiempo para leer y escribir, hablar con mis amigos que hace años que no nos llamábamos, y andar un par de horas por las tardes, ¡ojo!, alrededor de mi casa. Alguna vez discuto con la mujer, porque ahora estamos todo el día juntos, es cuando más nos necesitamos y luego sin ver a mis hijos y nietos, sin saltar las normativas que el gobierno nos ha puesto.

Pues esta mañana me llama un amigo y le pregunté como andaba, me dijo que bien, pero que esto lo tenían que haber cortado hace tres meses, como lo conozco, le dije, sí, antes que los chinos. Me comentaba que ahora la economía volvería para atrás y le dije, ¿qué pasa que piensas más en el dinero que en las vidas? tú con lo que tienes no te lo vas a gastar. Me dijo que era un castigo de Dios, comentándole, yo creo que si hay un Dios no será tan malo, creo que es un castigo de los hombres, que por donde pasamos arrasamos, cargándonos el planeta.

He trabajado en la construcción, cuando era joven se hacían las casas con barro, tapias y adobes para la gente humilde, todo era natural, hasta la comida. Pero, ¿qué ha pasado desde hace un tiempo para acá? hay que progresar, porque no te puedes quedar el último de la fila. Los labradores tienen que echar cosas a la tierra para producir, y la estamos quemando de tanto castigarla, aunque tenga consecuencias para la salud y el medio ambiente, el sistema obliga a ir con los tiempos, los ganaderos ídem de ídem, los banqueros roban al pobre para que viva mejor el rico, y esto no lo hace el de arriba, lo hacen estas personas que se creen dioses aquí en la tierra.

Esto tiene que cambiar, espero que para bien, estamos viviendo una psicosis, que mucha gente está haciendo mucho daño con bulos y mentiras, es obvio que es la tercera guerra mundial y quinta, donde uno puede tener muchos castillos, pisos, fincas, chalets,… pero el coronavirus no perdona ni a los pobres, ni a los acaudalados. Pedimos salud, pero con la cartilla llena, esto nos va a hacer pensar y quiero creer que nos vamos a humanizar más, seremos mejores, porque si no, no tiene sentido esta vida, porque los millonarios con el dinero que tienen no se morirían nunca.

Todo el mundo está consternado por el dolor que se está pasando, ya va siendo hora de revelarnos, basta ya de tanto dolor por nuestros seres queridos, que no puedes despedirte de ellos con una sonrisa o agarrándoles de la mano, donde sus corazones sangran por no poder despedirse de ellos, hijos y padres que es lo que más se quiere, donde los sanitarios luchan sin descanso, hasta perdiendo sus vidas y como estamos confinados con nuestros seres queridos, tenemos que pensar mucho y ordenar nuestras vidas.

Si es verdad que nos ha cogido el toro, como sucedió con el Ébola, tsunamis, terremotos. ¿Pero esto quién lo detecta? Es una guerra de todos y si queremos a España vamos a hacer un pequeño esfuerzo, empezando por los más pudientes y gobiernos, la parte alta, yo me considero la parte media baja, porque a los de abajo no se les puede tocar. No cobrando la paga extraordinaria, que vendría muy bien para los que más lo necesitan. De hecho muchos multimillonarios están haciendo donaciones y dejando sus negocios al servicio del pueblo, al igual que otras muchas personas voluntarias están aportando su granito de arena. Salimos de una guerra, hace poco de una recesión, pasándolas putas, así que de esta tenemos que salir, estoy seguro, porque España es un país muy solidario y humano.

No veo mucho la televisión, aunque estoy pendiente de los acontecimientos, porque se sufre mucho y me puedo dañar.

Políticos, para mí que lo están haciendo bien todos, aunque haya sus discrepancias, ya habrá tiempo de hablar ¡O nos damos la mano, o nos ahogamos todos!, vamos a dejar las banderas, las ideas, porque lo más grande que hay ahora son esos aplausos que brindamos a las ocho de la tarde a todos esos héroes anónimos, y ellos a nosotros por la admiración que les trasmitimos desde nuestras casas, donde están haciendo un trabajo de ejemplaridad sobrehumano: sanitarios, fuerzas del orden público, trabajadores en general transportistas, abastecimientos… Donde todos están en peligro fuera de sus casas para que nos podamos salvar los demás. Esos médicos jubilados que se han puesto al servicio del pueblo con dos huevos, pero no cojáis el gusto no siendo que le quitéis el puesto a los jóvenes, y son los que tienen que tirar para adelante. La economía vamos a dejarla, que una vez que te mueres no te la vas a llevar, no seamos mezquinos que por encima de todo están las vidas y termino.

Amigos, un abrazo muy grande, lo próximo que escriba, intentaré que nos riamos un poco, porque la vida sigue y no podemos tirar todo al precipicio, todo lo que han luchado nuestros antepasados y nosotros.

Un abrazo muy grande.

Alfonso “El Pindoque”

2020-03-30

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