El 9 de marzo de 2001, el entonces ministro de Defensa, Federico Trillo, pronunció las palabras “señores, se acabó la mili” para anunciarnos que se ponía punto final a un servicio que todos los españoles de género masculino debían cumplir para con su patria. Un servicio que se llevaba cumpliendo desde hacía unos dos siglos.
Por lo tanto, va a hacer 20 años desde que ya los quintos no tienen que ir al ayuntamiento de su pueblo a tallarse que era lo que había que hacer antes del sorteo para saber a donde te tocaba ir a la mili. Como todas las cosas, unos lo llevaban bien y otros no tan bien, pero era lo que había. Por ello se celebraba la fiesta de Los Quintos, que eran todos los mozos que habían nacido en el mismo año se juntaban y celebraban que durante ese año tenía que ir a la mili.
Marcha que se deja patente en diferentes canciones populares dedicadas a esos mozos que se iban a cumplir con su “obligación” de cumplir con la patria. En algunas ocasiones en tiempos de guerra. Y los problemas que podían tener aquellos que durante tanto tiempo dejaban en sus pueblos a las novias. Y sobre todo a las madres que “son las que lloran que las novias no lo sienten, se van con otros chavales, se ríen y se divierten” como dice la canción.
Pero bueno, las cosas han cambiado y ya cada cual cuando llega el momento, voluntariamente, decide si quiere ir o no a formar parte del ejército.
Pero la fiesta de Los Quintos se siguió y sigue celebrando y ya se incluye en ella también a las mozas, cosa que antes era imposible.
Ayer y hoy, 17 de enero de 2021, deberían estar de fiesta los Quintos de Villoria, pero debido a esta pandemia que llevamos padeciendo durante casi un año no ha podido ser. Tiempo habrá de celebrarla. Desde BESANA animamos a este grupo de Quintos, Los Topefloros que no decaigan en su ánimo y que en otra ocasión u otro año tendrán la posibilidad de celebrar y con más ahínco, si es el caso, su FIESTA.
ÁNIMO TOPEFLOROS
