Febrero se despide dejándonos un ambiente gélido en lo que a la climatología se refiere. El invierno nunca se queda para atrás, dicen los más mayores y experimentados. Esperemos que sean sus últimos coletazos y la primavera asome temprano mostrándonos su mejor cara. Se va el frío y con él la temporada de matanzas.
Guijuelo, pueblo pionero y ejemplo en este tipo de actividades , ha distinguido como matancero de honor, hace un par de días, a un guijuelense de pro: Cefe Torres, guijuelense, salmantino, charro y un poquito villorejo también. Aquí dejó su huella, su impronta y su arte en una etapa irrepetible para el folklore y la tradición charra en la zona de las Villas. Tiempos de danza, bailes, fiesta y alegría gracias a ese SURCO capitaneado por él, formado por jóvenes de nuestras tierras, que llevaron a muchos rincones y a lo más alto la música y la danza tradicional salmantina. Al acto no faltaron familiares y amigos que hicieron que la fiesta fuera completa. Desde aquí nos sumamos a este reconocimiento, aunque sea con algo de retraso. Nuestra más sincera enhorabuena.