Yo ya llevo siendo vecina de Villoria casi 30 años. Y he querido mandar a esta página algunas fotos antiguas mías.
Ya soy villoreja. Reconozco que al principio lo pasé mal. He vivido en grande ciudades aunque soy de pueblo y orgullosa de ello. Llevo mi pueblo con orgullo. Pero este pueblo no me viò nacer, y muchos ratos me los pasaba en Aldearrubia con mis padres. Luego fallecieron y la cosa cambia. No tengo allí ni primos carnales.
En fin, yo vine a Villoria por primera vez, cuando tenía 16 años a la discoteca Bonal. Luego me casé bastantes años después con un villorejo y con el tiempo me acostumbré a vivir aquí.
He procurado llevarme bien con la gente, aunque todos los días no se está igual. Y si alguna vez he estado de mal humor, pido disculpas.
Hoy en día con internet, el vivir en un pueblo es un lujo, pues es una ventana abierta al mundo, tenemos todas las comodidades y podemos trabajar sin movernos de casa. Pero lo más importante de vivír en el pueblo es no tener el aire asesino de la ciudad. Para otros internet les deprime. Cada uno habla de feria según le va en ella.
Inés García Hernández