Estas se apuntan a todas las fiestas:
Las cigüeñas, que nunca se fueron, y si lo hicieron volvieron pronto, no faltan a su cita con San Blas.
Qué la ausencia de nieves,
si no trae bienes,
al menos sea benevolente,
con eso será suficiente.
Para que pedir más,
si no nos lo van a dar
-como bien dice el refrán-
Pídanlo y ya verán.
También se puede llorar,
si de mamar se trata,
y si no lloramos,
ya se sabe:
no mamamos.
Así que lloremos,
pero de alegría,
para celebrar estos días:
San Blas, Santa Águeda
y las Candelas…
y que cada palo
aguante su vela.