NUESTRO RECONOCIMIENTO A QUIEN LO MERECE.

«Debemos encontrar tiempo para detenernos y agradecer a las personas que hacen la diferencia en nuestras vidas. «

John F. Kennedy.

 Aprovechando que el Tormes pasa por Salamanca, utilizaremos está frase del malogrado presidente estadounidense para llevarla a nuestro terreno. Hoy, con las últimas fiestas asentadas ya en el recuerdo, hemos encontrado el momento oportuno para hacer un alto en la información diaria, con el único fin de agradecer a las personas que marcan la diferencia en nuestras fiestas.

Ha llegado el momento de hacer el balance final, pero no seremos nosotros quienes lo hagamos; dejaremos esa función a criterio de cada uno. 

 Tan solo un apunte antes de hacer esa última evaluación: conviene tener en cuenta el capital humano que se pone en movimiento cuando llegan estas fechas para que todo salga lo mejor posible. 

 Detrás de cada acto programado hay muchas horas de trabajo, de entrega y sacrificio,no exentas de amarguras y sinsabores que, por fortuna, se contrarrestan con una buena dosis de compañerismo, alegría y solidaridad. Días de dedicación a los demás que pasan factura en forma de afonía, cabreos, nervios, taquicardias, insomnios y algún que otro inconveniente más que nos dejamos en el tintero. Bien es cierto que esto queda en el olvido cuando se recogen los frutos de ese, a veces, infravalorado trabajo.

 Lo ideal sería nombrar a todos y cada uno de los que ha puesto su granito de arena, tarea prácticamente imposible, siempre nos olvidaríamos de alguien.

 Habrá críticas, sin duda, críticas que deberán ser bienvenidas cuando estén bien argumentadas y aporten soluciones; si no es así serán mera chismorrería.

 A los que hemos sido receptores y beneficiarios de ese trabajo, nos honra y nos agrada que haya gente dispuesta a emplear su tiempo de ocio en pro de la satisfacción de los demás.

Muchas gracias y por muchos años más.