Los agricultores luchando por sus derechos.

«Sembrador que has puesto en la besana tu amor, la espiga de mañana será tu recompensa mejor». Así dice la canción.

Y quién dice sembrador dice labrador,
dice agricultor y ahora también….
sufridor.

Las besanas se han vuelto barbecho ,
las espigas cardos
los maíces lanzas,
las patatas pedruscos
y la remolacha sal amarga.

Tus noches, tus desvelos.
Tus miradas al cielo.
Tu trabajo sin horario.
Tus pérdidas,
Tus ganancias.
Tu supuesta arrogancia.

Todo puesto en entredicho
desde las altas esferas,
aquellas que, sin empacho,
dirigen vuestros destinos,
sentadas en un despacho,
brindando con un buen vino.

Gente con traje y corbata;
elegantes y estirados ,
que nunca se bajan al barro
ni pisan mierda de vaca.
Eso sí, cuando se sacan la foto
todos dicen: ¡Patataaaa!

Con maletines de cuero negro.
Negro como el futuro que pintan
para un campo que llora y grita
basta ya: no nos vengáis con esas,
queremos hechos, no promesas.

Hoy, sentados a la mesa ante nuestra comida, os pedimos perdón por nuestro silencio. Hoy también comeremos, por tanto, vuestra lucha debiera ser también la nuestra. Que lo que ocurra mañana no dependa de las decisiones de un despacho y si de vuestra dedicación y vuestro trabajo.
Agricultores, ganaderos y todo el sector primario: Mucha suerte y mucha fuerza.

SPP

Te interesa

NO FUE UNA TARDE PLACENTERA

Ayer, sábado 16 no tuvimos la tarde de cara y nos ganó el Cantalapiedra 0-2. …