SE ACABÓ LA PRETEMPORADA.
Si, habéis leído bien, PRETEMPORADA, porque así se puede calificar esta pantomima de competición en la que, por desgracia, se ha convertido la categoría provincial de aficionados salmantina. Nueve equipos han competido durante 16 jornadas para llegar al final de esta primera fase.
Un campeonato en el que los grandes perjudicados han sido los primeros clasificados. ¿De qué les ha servido hacer una excelente campaña?. Ahora se la tienen que jugar en una nueva competición. Nos ratificamos en lo dicho, esto que terminó el domingo pasado es lo más parecido a una larga pretemporada de preparación que solo ha valido para ocupar tiempo y ni siquiera ha servido de rodaje, puesto que ahora llega un parón de tres semanas- increíble, pero cierto-. Los del Promesas Villoria han terminado en sexta posición, pero esto, hoy por hoy, es lo de menos. A partir de ahora todos volverán a jugar una segunda fase divididos en dos grupos de cuatro y cinco conjuntos cada uno. Lo contaremos a su debido tiempo con más detalle.
Nueve equipos dan para muy poco, y se tienen que inventar nuevos enfrentamientos para alargar una competición viciada y devaluada desde antes de empezar. Es vergonzoso ver como, año tras año, este campeonato, que otrora contara con dos categorías provinciales y con equipos de gran nivel, hoy ve como apenas se inscriben nuevos participantes. Y no es que no los haya en Salamanca; ahí están los trofeos de fútbol modesto que engloban a más de 70 equipos repartidos en cuatro trofeos diferentes.
Envidia da ver la cantidad de clubes que disputan esta misma categoría en las demás ciudades de Castillas y León: Ávila cuenta con 15 equipos, Burgos, Soria y Zamora con 16 cada uno. Segovia cuenta con dos grupos de 13 y 14 , León con otros dos de 16 y 15 y Valladolid con 16 en 1ª regional y con 38 en 2ª divididos en tres grupos.
Ya es hora de que los dirigentes de la federación salmantina de fútbol salgan de su ostracismo, se bajen de la nube y analicen la situación en la que se encuentra esta categoría del fútbol charro. ¿Por qué en otras provincias funciona y aquí no?. Tiene que haber respuestas y, por ende, soluciones. Ellos la saben, como las saben todos los clubes que año tras año participan o intentan participar en este torneo, lo que hay que hacer es llevarlas a la práctica si no quieren que esto desaparezca. Así difícilmente se puede motivar a jugadores, directivos y aficiones. Muévanse de una puñetera vez, sean eficientes y demuestren que valen para el cargo que desempeñan.